Ellas esconden historias. En algunas, dicen, se ve el futuro. En todas se ve el pasado. Se agrietaron con el tiempo, las marcas se fueron haciendo surcos y cada cicatriz marcó a fuego un recuerdo. Descubrieron, enseñaron, trabajaron, jugaron, mostraron, se comprometieron, se ensuciaron, se lavaron, hablaron, callaron. Son ásperas, pero no por eso dan caricias secas. No buscan la perfección o la belleza, no saben de cremas ni las necesitan. Solían ser hermosas pero vacías. Hoy están llenas y delatan el paso del tiempo. Ellas esconden historias.
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Muy bueno lo de "en todas se ve el pasado", muy cierto. Las manos parecen unas de Escher. Un capo.
ResponderEliminarSon de Da Vinci... Muy buenas las de Escher también, estaba entre esas dos...
ResponderEliminarSaludos!
Lindo, lindo... yo amo unas manos suaves...
ResponderEliminarconcuerdo pero mis manos son hermosas jajaja, aunque parecen de un viejo de 50 años.
ResponderEliminarsaludos
Mis manos! Naaa... Flor, te cacharon, son mis manos...
ResponderEliminarASPERAS, como lija, no saben de cremas... is true. No importa, una vez me dijeron que las manos demuestran la sabiduría del alma, cuanto más arrugadas...
Mañana CENA con las 4 personas de la foto, esas que amas...
Yo también te amo amigaaaa!
Nos vemos.