"Tres". Y los nervios se sienten en la panza. "Dos". Respiro profundo. "Uno". Las manos se agarran con fuerza y hasta creo que me arrepentí. "Cero". El viento helado que pasa por la cara y se lleva un grito ahogado y un par de lágrimas. El hueco en el estómago y el coraje para levantar los brazos. Una bajada y esa increíble sensación de vacío que me hace sentir tan viva. Las vueltas que parecen estar fuera de control y ese miedo a que esta vez resulte ser la "una en un millón" y no frene. Los ojos bien abiertos para ver cómo gira todo y si es de noche, mejor. Una explosión de sensaciones, de esas que dan miedo al principio pero que no querés que terminen nunca.
Cualquier parecido con algún
sentimiento, es pura coincidencia.
"esa increíble sensación de vacío que me hace sentir tan viva"... eso es!
ResponderEliminarSí! so true... pero mera coincidencia!
ResponderEliminarAsí se siente...
Quiero estar sobre la montaña rusa otra vez, pero tengo que cambiar de asiento.
;)
Te quiero!
Para el primer asiento la fila suele ser más larga, pero es el mejor! A veces hay que esperar por el mejor... ;)
ResponderEliminarOdio las montañas rusas! Pero amo el amor!
ResponderEliminarahora que lo pienso son bastantes parecidas las dos cosas...
ResponderEliminarlas montañas rusas me dan miedo...me da miedo que me pase algo y hace un tiempo, lamentablemente, le empece a tener miedo al amor. Mecanismo de auto-defensa que le dicen.
Y según dicen lo bueno se hace desear...pero cuaaaaanto!!!!!!!!
te faltó el frío en la nuca, antes de que salga el "gusanito" o cuando lo ves parado en la esquina y no sabés como saludarlo (consejo florístico: llegá vos quince minutos antes así el que te tiene que saludar es el! jajaja)
ResponderEliminarcomo te quiero amiga!
ajajajaj me hiciste acordar a cuando era chiquito en el parque de la costa....
ResponderEliminarproximo paso paracaidismo y lestoo