Llegaste sin previo aviso y te metiste entre mis sábanas de dudoso algodón egipcio. La noche estaba fría pero me hiciste transpirar, delirar. Me despertaste a las 2, a 4, a las 6. No me diste tregua, no me diste respiro. A las 9 papá nos trajo el desayuno, porque sabía que estábamos juntos. Cuando estoy sola lo tomo en el comedor, pero por hoy está mejor en la cama. Y con todo lo que tengo que hacer, no puedo más que quedarme con vos así, acostada, con el termómetro bajo el brazo y un Tabcin que te amenaza desde la mesita de luz, pero no parece estar haciendo mucho para que te vayas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Dicen los que dicen que saben que la gripe dura, como sea, ocho días. Que medicarse sólo sirve para no pasarla tan mal. Un beso, princesa, qué te mejores.
ResponderEliminarOuch!
ResponderEliminarEstabas muy resfriada mientras comías ravioles.
Felipito es increíble, que te mejores. :)